La calidad de la imagen es mayor pero el blog está atontado últimamente, no lo entiendo. Bien, la chica guitarrista y cantante es Russian Red, de nombre real Lourdes Fernández y cuyo primer disco poseo con mucho cariño, y aquel martes 23 de septiembre con más cariño si cabe, y es que me fui de allí con la caja firmada. No sólo cumplí por fin mi ilusión de verla en directo sino que me llevé de allí una muestra de afecto por parte suya -y de su guitarrista Manuel, muy majo también-. Después tocaron American Music Club, unos aburridos increíbles. Por suerte teníamos coca cola con vodka jajajaja.
Y cómo es la vida, a veces da unas sorpresas increíbles. Primero de todo, porque cuando escuché por primera vez a Krakovia les hice tan poco caso que nunca se me hubiera pasado por la cabeza verles pasándoselo tan bien encima de un escenario. Lo que digo siempre es que tienen un estilazo. Antes vi a Mishima, Antònia Font y los grandísimos Primal Scream. Buah, ¿a Primal Scream? ¿Yo? Pero si les conocí únicamente porque sabía que era uno de los grupos que iba al Summercase de este año, y anda que no me rallaba a mí "Can't Go Back"... pues en directo, buenísimos; Bobby, muy majo y el guitarrista, ¡delante nuestro, detrás de unas rejas!
Un concierto curioso fue el de Katy Perry. Qué haría yo ese día viendo a la Katy Perry, qué cosas. "I Kissed A Girl" es un tema tan bueno como trascendente, y la chica no creo que pase más que de one hit-wonder. Pero igual el concierto fue divertido y el adjetivo de 'fiera' lo lleva tatuado en la piel desde que pisa el suelo del escenario en el segundo 1. A ver qué tal le van las cosas en el futuro...
Pero hay conciertos que nunca se olvidan. Tal vez el concierto de mi vida aún no haya llegado, pero hasta entonces serán The Rasmus quienes ocupen el lugar de mi mente dedicado exclusivamente al recuerdo de conciertos. Porque la vida da muchas vueltas y muchas sorpresas, eso está claro. Cuando vi "In The Shadows" por la TV, vi a un grupo de rock que sonaban muy oscuros y me encantaron. Recuerdo exactamente el momento cuando vi su disco DEAD LETTERS y lo cogí de la tienda para llevármelo.
Y recuerdo también que compré INTO días después, la edición especial; álbum que, por cierto, rememoro estos días y cada vez me gusta más.
Y recuerdo que HIDE FROM THE SUN lo compré en el mercadillo de San Boi. Un discazo.
Y ese concierto, el día 26 de septiembre. No sé qué me pasa con The Rasmus que cada cosa que hago relacionada con ellos no se me olvida. Mañana compraré, si nada lo impide, su nuevo álbum BLACK ROSES. Seguro que lo recordaré igual que todo lo demás.
1 comentario:
Qué suerte tienen algunos... el lujo de ver en directo Russian Red... qué envidia me das hijo de puta (^^) pero tu tranquilo, que quizás veré mi Helen en directo.
Jodete hijo de la gran puta (^^). Yo también te odio.
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